Ficha Nannacara Anomala

Nannacara anomala ( Regan, 1905).

Nombre científico. Nannacara anomala.

Nombre común.
Cíclido enano dorado, Cíclido enano de ojos dorados o Goldeneye.
Clasificación.
Orden: Perciformes.
Familia: Cichlidae.
Subfamilia: Cichlasomatinae. 

Distribución.
Desde el río Aruke en Guayana Francesa, a la parte baja del río Marowijne, en Surinam.

Forma.
Forma corporal típica de los cíclidos enanos, de cuerpo alargado y de compresión lateral.
La cabeza presenta forma redondeada bastante característica.
Presenta unas aletas dorsal, anal y pélvicas terminadas en punta, mientras que la aleta caudal tiene forma redonda de abanico.

Coloración.
Los machos muestran una coloración mayoritariamente azul muy brillante con destellos amarillos o verdosos dependiendo del ejemplar, con tonalidades amarrillo o marrón claro sobre todo en la región dorsal, en las escamas, y en la parte frontal de la cabeza.
En las aletas podemos encontrar una coloración anaranjada, y una fina línea rojiza que perfila la dorsal en su totalidad.
Uno de los rasgos más característicos es sin duda el ojo, de un brillante color amarillo, por el cual se le da el nombre de “Goldeneye”.

La hembra tiene una coloración de base amarilla o marrón claro prácticamente en su totalidad, mucho menos vistosa que el macho. Y la cruza una marcada línea negra que en unas ocasiones nace desde detrás del opérculo, y en otras desde el ojo, pero siempre va a terminar en el pedúnculo caudal.

Llama la atención el fascinante cambio de coloración que sufre la hembra durante la época de cría, oscureciéndose totalmente, y adquiriendo un patrón de color negro en forma de tablero de ajedrez.

 Hay que comentar que, en caso de encontrarse dos machos en el mismo acuario, si uno de ellos es el dominante, el dominado posiblemente adoptará una coloración similar a la hembra para escapar del acoso del primero.
En caso de retirar al dominante, en poco tiempo el dominado adquirirá el color y tamaño de macho dominate.

Tamaño.
Los machos alcanzan un tamaño mayor que las hembras, siendo los primeros de una talla alrededor de los 8 - 9 cm, mientras que las hembras alcanzan los 5 - 6 cm.

Diferencias sexuales.
Además de la coloración anteriormente explicada, los machos presentan un tamaño superior a las hembras, y unas aletas dorsal, anal y pélvicas más desarrolladas y puntiagudas que la hembra.

Acuario.
Recomendable 80 litros mínimo para una sola pareja.
El acuario deberá estar provisto de mucha vegetación, así como abundantes rocas y madera, que ayudarán al N. anomala a sentirse más seguro gracias a la posibilidad de buscar refugios.

Temperatura.
Entre 23 y 27ºC aproximadamente.

Agua.
pH entre 6 y 7´5, con una dureza máxima por debajo de 10º dGH.
Es una especie muy sensible a compuestos nitrogenados, debemos mantener NO2 y NO3 lo más bajos posibles y proporcionarle abundantes cambios de agua.

Alimentación.
Este cíclido enano no presenta problemas para alimentarse, acepta sin dificultad todo tipo de alimento, pero siempre hay que tener en cuenta el proporcionarle una amplia variedad.
También hay que tener en cuenta que su dieta se basa principalmente en las proteínas, con un aporte vegetal de vez en cuando.
Una buena papilla para discos será ideal para el N. anomala, alternando la con gránulos y escama, alimento congelado como larva roja o artemia, y alimento vivo tal como grindal.
Se debe tener especial cuidado con no sobrealimentar, puesto que como ya se ha comentado, es bastante sensible a algunos parámetros del agua ( NO2 y NO3), y una sobrealimentación podrían elevarlos demasiado, con consecuencias nefastas para el animal.

Comportamiento.
El N. anomala se trata de un cíclido que presenta un carácter muy pacífico, en ocasiones puede incluso llegar a dejarse acosar por otros cíclidos similares si los mantenemos juntos.
Su carácter tranquilo le convierte en una buena opción para un acuario de tipo comunitario, con peces que compartan valores del agua y comportamiento.
Puede juntarse con otros cíclidos enanos siempre que no sean demasiado agresivos.
Sin embargo, durante la cría, los niveles de violencia que presenta la hembra se disparan, no permitiendo a ningún otro pez aproximarse a la prole, incluso llegando en ocasiones a matar al propio macho. No obstante, este caso no se suele dar, por lo que el resto de compañeros del acuario no correrán demasiado peligro, pues aprenderán rápido a no aproximarse a la hembra cuando muestre el cambio de color propio de la época de cría.
Esto convierte a las hembras en unas de las mejores madres que podemos encontrar dentro de los cíclidos enanos, las cuales defenderán su progenie a toda costa.
Fuera de la época de reproducción, el carácter de la hembra será el anteriormente mencionado, muy pacífico y tranquilo.

Reproducción.
La reproducción del N. anomala es muy sencilla, siempre que se mantengan unas condiciones mínimas ideales para tal fin.
El macho buscará un territorio que defenderá de los intrusos, y después acosará a la hembra, la cual lo terminará aceptando si está sexualmente madura.
La puesta se realizará preferiblemente en una cueva ( previamente elegida por el macho), sin embargo también puede darse el caso de que la puesta sea realizada sobre una hoja plana, roca, o sobre el sustrato directamente.
La madre pondrá entre 100 y 300 huevos, que tardarán alrededor de 72 horas en eclosionar.
Una vez hayan consumido el saco vitelino comenzarán a nadar, momento en el que se debe empezar a alimentarlos con naupilios de artemia o huevos de langosta congelados.
Si el tamaño del acuario es reducido, conviene sacar al macho tras fecundar los huevos debido al alto grado de agresividad que alcanzará la hembra.


Notas.

La palabra Nannacara proviene del latín, "nanus" = pequeño, y del Guaraní , "acara" = cíclido.

Por su parte, anomala proviene también del Latín "anomalus" = inusual, raro.

La primera importación llegó a Europa en 1912 según Koslowsky (1985), sin embargo otras fuentes afirman que dicha importación no fue realizada hasta 1934 por Fritz Mayer.

Son peces muy presentes en los comercios dedicados a la acuariofilia a día de hoy, y la facilidad de su mantenimiento, junto a la facilidad que representa su cría, los convierten en una apuesta segura para acuariófilos principiantes en Cíclidos enanos.

Vídeo: